Nota de prensa

Martín califica de “error irresponsable y sospechoso” la
externalización de los planes especiales del Antiguo Santa

Cruz y de Los Hoteles

  • El portavoz socialista afirma que no existe ninguna razón que
    justifique la redacción de estos planes fuera de la Gerencia
    Municipal de Urbanismo
  • Además, subraya que con este tipo de medidas se regresa al
    “Santa Cruz de Zerolo”, donde los intereses privados priman al
    general

El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Santa Cruz, José
Ángel Martín, ha calificado de “error irresponsable y muy
sospechoso” la externalización de los planes especiales de los
conjuntos históricos del Antiguo Santa Cruz y de Los Hoteles. Para
Martín no existe ninguna razón que pueda justificar la redacción
de estos documentos fuera de la Gerencia Municipal de Urbanismo
(GMU). En este sentido, explica que “desde el punto de vista
económico conlleva un desembolso de 500 mil euros por cada
plan, lo que supone una inversión de casi un millón de euros
frente al coste cero que implicaría la redacción por parte de los
funcionarios de la GMU”. Por otra parte, recuerda que “los
técnicos ya han avanzado en ambos planes en un 80 por ciento y
la externalización supone un retraso hasta el 2016 en su
redacción inicial, fecha en la que concluiría la redacción por parte
de los funcionarios”.

Martín Bethencourt recuerda la experiencias del pasado en cuanto
a la externalización de planes e indica que ha sido un “auténtico
fracaso”. Al respecto, pone como ejemplo el Plan General de
Ordenación de Santa Cruz (PGO), “que supuso una inversión de
seis millones de euros y casi 11 años de trabajo para terminar con
un semillero de pleitos o el Plan Especial de El Toscal, con más de
500 mil euros invertidos y 12 años de trabajo que trajeron el
conflicto social al barrio”. “En ambos casos se resolvió finalmente
gracias a la labor de la GMU”, añadió.
Para el portavoz socialista todas estas últimas actuaciones por
parte del nuevo equipo de Gobierno “comienzan a recordar al
Santa Cruz de Zerolo donde los intereses privados priman al
general, apartando a los funcionarios de sus tareas y
externalizando trabajos para los que están más que cualificados”.